Que
es que me da igual si hay lluvia, sol, viento o desprendimientos; que me va
mejor desde que sé que hay escala de grises, blancos y negros con sus matices.
Que a veces me ahogo en los mares de mis pensamientos pero no miento si te digo
que me va dando igual. Que uno acaba aprendiendo que el perfeccionismo a veces
es lo contrario a lo bueno porque lo perfecto no existe, y si existe, ¿qué más
da? Que con el tiempo he decidido que me niego a ser el pasado, presente o
futuro de otra vida que no sea la mía.
A
veces me imagino viviendo en una especie de burbuja incomunicada, como dejando
tu vida en stand-by; eso tiene que ser maravilloso. De hecho, sé de
gente que va dando saltos de país en país dejando su vida en estado de espera
durante tiempo indefinido. Me imagino no haciendo nada por obligación, como
llamar o quedar con alguien sin que te apetezca, cumplir promesas que no
significan nada, y cosas por el estilo. Ahí fuera solo estarías tú mismo,
dedicándote a desenvolverte en tu nueva situación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario